Unas palabras dedicadas a ese par de enormes hermanas que muy coquetas se pasean frente a mis ojos contoneándose al ritmo que marca el reggaetón de alguna compu lejana.
Son las gemelas de rojo, las hermanas tentación; dulces y deliciosas. Casi no tiemblan, se muestran firmes al ser observadas.
Hace unos años me di el gusto de pasear con ellas, eran otros tiempos y eran más pequeñas.
Hoy me miran en silencio, incluso con desprecio, yo las miro en silencio y con desprecio y con deseo.
¡Todas las mañanas al salir el sol me lavo la cara con agua y jabón y le dedico el buenos días a las hermanas tentación!
Hoy son de rojo, mañana de otro color, pero si mal no recuerdo, grandes o pequeñas siguen siendo del mismo sabor.
¡Salud!
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1 comentario:
Sarcasmo y actitud.
Siempre te leo.
Saludos
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